Recuperar del cajón recuerdos como éstos.

Supongo que la vida lo quiso así y darme el enorme lujo de poder conocerte en todos lo pequeños y

grandes sentidos, de enseñarme que a veces se van del camino grandes personas pero que siempre quedará esa pequeña sensación en tu estómago que otro no podrá conseguir y que hace que se le extrañe tanto...

Porque hoy, aún quizás algo tarde, quiero agradecerte por todos aquellos momentos que he podido compartir a tu lado. Por haber tenido la suerte de encontrarme contigo en este largo camino que aún nos queda por recorrer. Por ser aquella amiga que uno necesita tener en los buenos y en los malos momentos.

Así, que con una enorme sonrisa aún cargada de nostalgia espero que la vida te brinde con una nueva oportunidad llena de ilusiones por cumplir y de las que sé que lograrás llevar acabo; pues uno nunca aprende lo suficiente y ha de compensarlo con paciencia y esfuerzo.

Te echaré de menos Gemma,
¡Besos! 

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